El Lenovo Tenerife deja su sello en la Caldeira de Lugo
Un triunfo incontestable. Parece fácil, pero no lo es. Ni mucho menos. El Lenovo Tenerife impuso este sábado su ley en la caldeira de Lugo, tras firmar una gran exhibición coral ante el Rio Breogán (61-86) y festejar su octava alegría liguera de la temporada en nueve jornadas. El grupo de Txus Vidorreta se aferra al liderato de la ACB con una victoria sólida, forjada desde la defensa y el compromiso del bloque.
En otra gran faena colectiva (anotaron los doce de la rotación y seis valoraron en dobles dígitos), el equipo tinerfeño trasladó con máxima eficiencia al parqué el plan de partido diseñado por su cuerpo técnico para anular las virtudes de su rival e imponer su sello.
Un enorme trabajó atrás, el criterio para mover el balón y buscar buenos tiros, junto a unos notables porcentajes de acierto (44% en triples y 60% en tiros de dos), explican en parte el triunfo aurinegro, en una gran atmósfera de basket, incluidos unos 40 aficionados canaristas en la grada.
Comenzó muy metido el conjunto insular, pese a ceder de entrada tres segundas opciones bajo tablero. La fortaleza defensiva y el buen hacer en ataque lanzaron de entrada al Canarias, que comenzó a sumar de tres en tres, bien desde el 6,75, con triples de Sasu Salin y Bruno Fitipaldo, o con un par de acciones de 2+1, lo que le permitió enfilar el segundo cuarto con las primeras rentas significativas (9-24).
Lejos de bajar el nivel, la segunda unidad mantuvo el listón. Los buenos minutos de Fran Guerra, primero; y otro triplazo después de Sasu para minimizar el amago de reacción de los anfitriones, tras un parcial de 5-0, permitieron a los laguneros irse otra vez con holgura en el electrónico y marcharse al receso 14 arriba (30-44).
Con Scott Bamforth muy bien sujeto por los insulares, el Rio Breogán se encomendó a Ethan Happ para intentar meterse en partido a la vuelta de vestuarios, pero no bastó para contrarrestar el buen juego de los tinerfeños. Tres triples de Marce, Aaron y Cook volvieron a estirar la renta (34-53, min. 25) y a frustrar del todo a los locales.
Con toda la rotación aportando, no solo en puntos, sino también en muchos intangibles (Aaron, Moussa, Tim…); y la batalla del rebote controlada, el Lenovo Tenerife exhibió su mejor versión. Los balones interiores a Gio Shermadini, dos triplazos de Bruno y los puntos de Iván Cruz pusieron la guinda final a otra victoria muy meritoria. Un triunfo sólido, que demuestra que el liderato de los aurinegros no es, ni mucho menos, casualidad.